Sillas de Playa

El problema viene a la hora de elegir el tipo ideal para TU silla de playa. ¿Mejor silla plegable o rígida? ¿De tela o de plástico? ¿Elijo una silla de aluminio, madera o PVC? Todo depende de las circunstancias de cada uno, por ejemplo, no es lo mismo si vas a la playa en coche, transporte público o andando.

¿Sabes entre que materiales, marcas y modelos puedes elegir para tu silla de exterior? ¿Te gustaría poder comparar entre todos ellos para comprar la mejor silla plegable al precio más barato posible? En este artículo encontraras todo lo necesario para decidirte, incluyendo las ofertas más económicas del mercado.

Las sillas playeras presentan una amplia variedad de formas, tamaños y materiales. Sillas de playa altas, bajas, pequeñas, tumbonas, taburetes, de madera, metálicas, etc., cada una de las cuales atiende a las necesidades de los diferentes tipos de personas que visitan la playa.

Junto con el tamaño y la forma, las sillas de playa también pueden incluir una variedad de características especiales, como sillas de playa con respaldo, plegables, con portavasos, reforzadas, con sombrilla, acolchadas, etc.

Los materiales utilizados en los marcos de las sillas de playa suelen ser aluminio, acero, plástico o madera. Cada uno de ellos presenta sus ventajas y desventajas:

• Sillas de playa de aluminio:

  Son posiblemente las más populares entre los amantes del océano, debido a su estructura liviana, fácil transporte y bajo precio. Su marco brillante de aluminio presenta una alta resistencia a la corrosión, lo que permite limpiarla fácilmente y disfrutarla durante años sin preocuparnos en exceso de su mantenimiento. Si estás buscando una silla de playa ligera pero que sea resistente al peso asegúrate de que puede soportar entre 110 y 135 Kg.

• Sillas de playa de acero:

  Son menos populares debido a su mayor peso, lo que dificulta su transporte. Sin embargo, si lo que buscas es una silla de playa reforzada, resistente y duradera, esta ha de ser tu elección.

• Sillas de playa de plástico:

  Son sillas de polipropileno generalmente muy ligeras, económicas y de mantenimiento sencillo. Por contra suelen ser sillas rígidas, que no se pueden plegar, lo que dificulta bastante su transporte a la arena.

• Sillas de playa de madera:

  Están especialmente diseñadas para la longevidad, la comodidad y la elegancia. Se suele pensar que su principal inconveniente es el peso, por lo que este tipo de sillas son más adecuadas para el jardín o el camping, siendo muy habituales en terrazas, piscinas, etc. Sin embargo, podemos encontrar en el mercado sillas de madera lowcost muy ligeras y que incorporan correas o agarraderas para facilitar su transporte.

Otro aspecto a tener en cuenta a la hora de elegir tu silla de playa es el material del asiento y del respaldo. Las telas suelen incluir acrílicos de grado marino, que se tratan para resistir la decoloración y el salitre.

• Sillas con tejido plástico:

  Son las más comunes que podrás encontrar en cualquier tienda online. Generalmente son muy sencillas de limpiar y de mantener, y la gran disponibilidad de este material hace que tengan la mejor relación calidad-precio del mercado.

• Sillas de tela de malla:

  Este tipo de revestimiento es muy adecuado para librarte de la arena y no tener que estar sacudiendo el asiento todo el tiempo. Algunas vienen equipadas con malla de nylon balístico, un material tan resistente que originalmente se desarrolló para ser usado en chalecos antibalas; o Textilene, una malla de alta resistencia que también ofrece protección UV.

• Sillas de tela tradicional:

  Actualmente están fabricadas con poliéster, nylon o spandex, lo que las convierten en sillas con tela de secado rápido. De esta forma podemos sentarnos cómodamente después del baño con la seguridad de que la tela de nuestra silla estará perfectamente seca tras unos pocos minutos.

► Sillas playeras bajas:

Una silla de playa de asiento bajo, también conocida como silla de playa clásica, es aquella que tiene el asiento entre 20 y 30 cm del suelo. Por debajo de esta altura ya estaríamos hablando de esterillas de playa o sillas de arena. Este tipo de sillas, aun cuando son bastante livianas y fáciles de transportar, pueden soportar pesos de hasta 115 kilos.

Muchos amantes de la playa prefieren sillas de asiento bajo porque permiten estirar las piernas en la arena y así conseguir un bronceado uniforme en la parte inferior del cuerpo. Además, generalmente disponen de múltiples posiciones reclinables, de forma que puedes estirarte completamente y disfrutar de un bronceado de cuerpo completo sin tener que levantarte de tu silla.

► Sillas de playa altas:

Este modelo de butaca para la playa tiene el asiento situado a 30 cm o más del suelo. Si quieres poder sentarte y levantarte sin dificultad este tipo de silla es el ideal para ti, ya que genera mucha menos tensión en las piernas y rodillas que una silla de asiento bajo.

► Sillas de playa pequeñas:

Son de menor tamaño que las sillas normales y tienen un asiento muy cercano al suelo. Su mayor ventaja es que son sillas muy ligeras, que unido a su pequeño tamaño hacen que sean muy fáciles de llevar a la playa. También son muy adecuadas para mantener el cuerpo alejado de la arena en esos días de «arena caliente».

Esta suele ser una silla rígida, de una sola posición, y aunque está diseñada para los adultos resulta ideal para los niños. Su capacidad de carga ronda los 85 kilos y es una de las sillas de playa más duraderas. Además, hay que tener en cuenta que tienden a ser más baratas en comparación con otras sillas de playa, lo que te permitirá ahorrar un buen dinero.

► Tumbonas de playa:

También conocidas como hamacas de playa, este modelo es el más cómodo que podrás encontrar. Suelen ser bastante grandes, con longitudes que van desde los 145 a los 190 cm. Generalmente, estos sillones de playa incluyen relleno y almohada ajustable para un mayor confort.

Existen modelos de sillas de playa con reposapiés extraible, de forma que podemos transformar nuestra silla en tumbona y viceversa. También las hay con accesorios que los transforman en sillones reclinables flotantes, ideales para la piscina, el mar o un lago.

Generalmente las tumbonas para la playa vienen equipadas con diferentes extras, como portavasos, varios bolsillos para guardar tus enseres, bolsas refrigeradas o ruedas.

Además de su propósito más obvio, muchas marcas de butacas para la playa añaden a sus productos un sinfín de accesorios y características adicionales que hacen nuestra estancia en la costa más agradable. Estas son algunas de ellas:

• Sillas de playa plegables:

  Sin duda la característica más común y buscada cuando tenemos que transportar nuestros enseres a la arena. La posibilidad de recoger la silla sin esfuerzo y transportarla fácilmente no puede faltar cuando tenemos que desplazarnos cargando con más cosas.

• Sillas de playa reclinables:

  ¿A quién no le gusta echarse una siestecita en la playa de vez en cuando? Esta funcionalidad te permitirá modificar la posición de tu silla o tumbona para que se adapte a tu gusto en cada momento.

• Sillas de playa reforzadas:

  Son más grandes que las sillas tradicionales, hechas con un armazón y un tejido extra fuerte y pensadas para aquellas personas que necesiten una silla de playa resistente al peso. Para ser considerada como una silla de playa resistente debe ser capaz de soportar al menos 125 kilos. Ciertos modelos pueden llegar a soportar hasta 225 kilos.

• Sillas con nevera:

  Actualmente existen una amplia variedad de modelos que disponen de una bolsa térmica en su estructura. De esta forma siempre tendremos un refrigerio o una bebida fría a mano para combatir el calor de los días de verano en la playa.

• Sillas y tumbonas con sombrilla:

  Ideales si queremos hacer una escapada rápida junto al mar y no nos apetece cargar con demasiado equipaje. Un dos en uno que cada vez está más de moda en las costas, y que te permitirá proteger tu rostro de los molestos rayos del sol.

• Sillas de playa con ruedas:

  Si bien aún no es una característica muy común en este tipo de accesorios, resulta muy útil a la hora del transporte. No solo te permite llevar la silla rodando sino que también puede servir como carrito para el resto de tus pertenencias.

• Sillas de playa con mochila:

  Incorporan correas que permiten llevar la silla a la espalda como si fuera una mochila. Es muy adecuada cuando necesitas las manos libres para dárselas a tus hijos, usar tu teléfono móvil, etc.

¿Ya tienes claro que silla de playa es la que TU necesitas? ¡Pues no esperes más! Hazte con ella cuanto antes y comienza a disfrutar de todas sus ventajas durante tus vacaciones junto al mar.